El uso de las Cefalosporina en Pediatría Veterinaria, está dirigido hacia diferentes enfermedades infecciosas bacterianas, debido a su baja toxicidad y escasos efectos secundarios.

El uso de las Cefalosporinas en Veterinaria está comprobado y muy bien documentado. Están muy bien estudiadas las propiedades generales, la actividad antimicrobiana y las características farmacocinéticas de las mismas, así como su clasificación en diferentes clases, dando como resultado las cefalosporinas de 1°, 2°, 3° y hasta de 4° generación.

En Pediatría Veterinaria, su uso está dirigido hacia las diferentes enfermedades infecciosas bacterianas, debido a su baja toxicidad y escasos efectos secundarios que las hace comparar con las bondades de otras drogas antimicrobianas como la Penicilina y sus derivados.

 El uso de las cefalosporinas en cachorros felinos de raza Persas desde el nacimiento, es muy beneficioso para evitar enfermedades infecciosas bacterianas pulmonares, como consecuencia de acumulo de líquidos en los mismos durante el proceso del parto (los gatos Persas presentan nariz corta por lo que los líquidos gestacionales pueden pasar con facilidad hacia los pulmones). Es notoria la diferencia en los criaderos de gatos de esta raza, donde se administra antibióticos en los cachorros inmediatamente de nacer comparados con criaderos donde no se dan, en el primer caso la aparicion el Síndrome del cachorro débil y muerte perinatal es mucho menor.

Las cefalosporinas junto a las penicilinas son las drogas de elección en los cachorros caninos y felinos que nacen por cesárea para evitar infecciones o complicaciones post quirúrgicas

Las onfalitis originadas en el post parto o por falta de higiene en las parideras suelen remitir con el uso de antibióticos tipo Penicilinas o Cefalosporinas, junto con la limpieza y desinfección del ombligo y del cordón umbilical con soluciones antisépticas como el agua oxigenada de 10 volúmenes o la Iodopovidona.

En los cachorros que presentan infecciones de piel por falta de lamido o limpieza por parte de la madre o mala higiene ambiental, las cefalosporinas son los agentes antimicrobianos usados de primera elección.

La leche tóxica que afecta a algunos cachorros surge como consecuencia de la infección en la leche materna debido a mastitis, retención placentaria, endometritis, etc. Esto produce una gastroenteritis en el cachorro que en caso de no solucionarla a tiempo termina habitualmente en una septicemia. El tratamiento en los cachorros consiste en un destete de 24 hs, administración de solución isotónica de glucosa al 5% oral (en caso de que no haya vómitos), y antibióticos como las penicilinas o las cefalosporinas. En caso de cuadros graves también se administra soluciones parenterales en forma intraósea. En la madre se administra un antibiótico de amplio espectro y limpieza con desinfectantes diluidos tipo Cloroxilenol o Clorhexidina en las mamas.

En los criaderos debido a la posibilidad de animales hacinados con la permanente salida y entrada de los mismos como causa de exposiciones y/o renovaciones, las enfermedades respiratorias de las vías aéreas altas son comunes, afectando con mayor gravedad a los cachorros y la administración de antibióticos de amplio espectro está indicada para prevenir las complicaciones.

Hay diferencias en la farmacodinamia de las drogas en los cachorros comparadas a los adultos debido a que los primeros presentan una menor grasa corporal, menor porcentaje de agua corporal, albuminemias menores, menor metabolismo hepático y excreción renal diferente por lo que es necesario la administración de dosis menores de los agentes antimicrobianos y a su vez con un mayor intervalo en la dosificación de los mismos.

La dosis de Cefalexina en los cachorros es de la mitad que en los adultos, es decir 15 a 20 mg/Kg cada 12 hs. oral (comprimido o jarabe). En caso de los Persas recién nacidos debido a lo difícil de su dosificación se administra una gota de cefalexina jarabe de 250 ml cada 12 hs, oral.

También se usa la Cefalotina inyectable SC o IM igual dosis que la anterior, en caso de los cachorros con vómitos, ya que la administración oral de cualquier droga puede agravar el cuadro clínico.

La Ceftriaxona es muy útil ya que se usa cada 24 hs, intramuscular o intraosea. Esta es la de elección en los cachorros que nacen por cesárea.

Como se puede apreciar las cefalosporinas son de uso común y corriente en pediatría veterinaria ya que su efectividad es muy buena comparadas con otros antibióticos, además de poseer pocos efectos secundarios y ser de baja toxicidad.